8 de la mañana. Suena el despertador en casa de Andrew Sullivan.
Mientras apura su primer café, nuestro hombre se despereza y se asoma al
ordenador.
Es su forma de vida y la ventana que le ha catapultado al
éxito. Es posible que el nombre no le resulte familiar, pero Sullivan es
uno de los blogueros más influyentes en Estados Unidos y el azote de
muchos políticos en su irreverente blog The Daily Dish.
Un proyecto que vio la luz a finales del año 2000 y que en menos de dos
años ya acumulaba 300.000 usuarios únicos al mes. Palabras mayores. Los
lectores se han rendido al estilo duro, directo y sin cortapisas de
este hombre de contrastes. El tal el efecto tractor de su afilada pluma,
que tras cambiar la forma de rentabilizar el blog, Sullivan ha
conseguido recaudar en menos de 24 horas la friolera de 333.000 dólares. Y como apuntan en Mashable, posiblemente "sin quitarse el pijama".
The Daily Dish
se ha convertido claramente en su forma de vida, y como podemos
descubrir, bastante desahogada. En este blog se trata la política sin
tapujos, sin trapos calientes. Con una plantilla de apenas siete
redactores, el célebre blog analiza agudamente el devenir de la política
en Estados Unidos sin casarse con nadie. Esta libertad de pensamiento y
expresión tiene su recompensa: son ya cerca de un millón de lectores
únicos al mes que además han demostrado una gran fidelidad. El blog se
nutría hasta la fecha de un clásico modelo de negocio basado en la venta
de publicidad mediante banners, pero nuestro irreverente protagonista
decidió arriesgar y virar hacia un modelo de suscripción: desaparecían los anuncios pero para acceder a todo el contenido, el usuario debería abonar una cuota de 20 dólares al año.
Cambio de modelo
Se trata, en realidad, de un modelo de negocio más cercano al
freemium:
los lectores podrán acceder a todo el contenido si llegan a la web a
través de un link en redes sociales, pero deberán estar suscritos para
poder franquear el "Leer más" que nos deja a medias en lo mejor del
artículo. 20 dólares al año no parece una barrera de entrada insalvable y
los hechos parecen estar dando la razón al 'enfant terrible' de los
analistas políticos: han sido cerca de 12.000 los usuarios que han
abrazado la propuesta de Sullivan suscribiéndose en menos de 24 horas, e
incluso aportando más dinero del importe inicialmente solicitado por
este blogger-emprendedor. En unas pocas horas,
The Daily Dish sumaba 333.000 dólares y ponía a tiro el objetivo planteado por nuestro hombre de
alcanzar los 900.000 dólares en un año. Una cifra que a buen seguro queda atrás en cuestión de semanas.
La
maniobra comenzó a finales de año, cuando en un ejercicio de sinceridad
hacias sus lectores, Sullivan y su equipo anunciaron que
no se sentían cómodos trabajando para otro medio (hasta la fecha, contaban con un acuerdo de colaboración con
The Daily Beast
que les aportaba capital e infraestructura). La verdadera libertad
tenía que llegar siendo plenamente independientes y autónomos, y el
equipo fundó una sociedad entregándose de lleno a la voluntad de sus
lectores, que han respondido con creces al llamamiento. El equipo sigue
deslumbrado por el éxito de la iniciativa, pero pide más: "estamos
comenzando a escalar la montaña" y la cima está cerca. ¿Qué ofrecen a
cambio? "Prometemos ser lo más transparentes que podamos en la
información publicada".
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